PRAÇA ONZE

Praça Onze es el nombre de uno de los enclaves urbanos de Río de Janeiro que vieron nacer la samba, la pequeña África como así la llamaban. En las primeras décadas del S.XX se gestó la llamada “música clásica popular brasileña” que constituye un importante legado de la mano de autores como Pixinguinha, Chiquinha Gonzaga, Ernesto Nazaret o Jacob do Bandolín entre otros. Praça Onze se presenta a escena con una propuesta íntima y delicada, a la vez que repleta de fuerza y vitalidad expresiva.

El grupo interpreta piezas de cámara de autores contemporáneos brasileños que han sabido conjugar la esencia de los ritmos populares tales como el choro, la samba, frevo etc con las influencias del jazz y la música clásica occidental.

Bebe / Hermeto Pascual

Bate-Coxa / Marco Pereira

Lis / Marco Pereira

Pinote / Sergio Assad

Vitoria Regia / Sergio Assad

Recifes de corais / Sergio Assad

Assobio a Jato / Heitor Villalobos

Um a Zero / Pixinguinha

Pixinguinha / Radamés Gnattalli

Baiao de Gude / Paulo Bellinati

Abismo de rosas / Tangará / Alfredo Lorenzo

Feliz iniciativa, nacida en la capital sevillana, del excelente guitarrista extremeño (Montijo, Badajoz, 1973), de formación clásica pero estudioso de otras culturas musicales (oriental y brasileña contemporánea), junto al flautista italiano (Pessaro, 1970) de prestigio internacional y al percusionista (y cantante) de Salvador de Bahia Lilly Pitta (que alterna las actuaciones con la docencia), para mostrar algunas de las maravillas de la música popular instrumental brasileña contemporánea, que conjuga la esencia de los ritmos populares (choro, samba, frevo, etc.) con las influencias del jazz y la música erudita europea del pasado siglo. Un cuidado trabajo con un concepto camerístico, intimista, delicado y a la vez lleno de fuerza expresiva.

En palabras de los propios interpretes “...queremos recrear unas composiciones que por su dificultad interpretativa son, por lo general, accesibles para músicos de formación académica, pero que a oídos del público requieren el mismo desenfado y sencillez que la música popular brasileña, lo que supone un desafío a la vez que un gran atractivo para nosotros”, pero sin olvidar la raíz de lo popular que está en todo momento presente en esta música.